Última película del siempre polémico danés
Lars Von Trier. ¿Lo de polémico será por mostrar su cine de una forma o manera tan peculiar y directa?. Es una pregunta que últimamente y después de ver Antichrist, no para de rondar mi cabeza. Sobre todo, después de haber escuchado cargar sin contemplación alguna, sobre la persona de Lars Von Trier . No entiendo esa postura, criticar a una persona por hacer un cine propio, en fin, eso son otros asuntos.
Antichrist cuenta la perdida de un niño en el seno de una familia. Concretamente, el niño de
William Dafoe (Padre) y
Charlote Gainsbourg (Madre). Durante unos momentos de total placer, donde Madre y Padre (no tienen nombre) disfrutan deliberadamente de sus cuerpos ajenos, es cuando sucede este accidente, cambiando el rumbo de sus vidas, para siempre. Dafoe, terapeuta, decide ser el propio medico que intente curar a su mujer. Tras un tiempo en su hogar e imposible de curar la tristeza y ansiedad de su mujer, deciden irse a una cabaña en las profundidades del bosque. Este lugar lo llamarán Edén y desde su llegada, comenzarán a cambiar las cosas drásticamente, empeorando hasta unos niveles inimaginables. En base, ésta es su historia, otra cosa es como el director danés nos la cuenta.
La película está divida en un prologo, tres capítulos y un epílogo, perfectamente narrados, dirigidos e interpretados.
Antichrist –
Prologo. Se queda uno acojonado, maravillado y sorprendido por el comienzo tan bello, perfecto e imposible de olvidar. Una auténtica clase de cómo manejar los medios cinematográficos, una puesta en escena brutal, impactante y tan meticulosa, que no se escapa detalle alguno. De lo mejor que he visto en mucho tiempo, increíble. Esa cámara lentísima capaz de filmar hasta el detalle más ínfimo, su blanco y negro impoluto y la música de Handel, hace que te sumerjas en ese sueño siempre anhelado.
Antichrist –
Capitulo I (Tristeza). La madre, tras la desaparición de su hijo, empezará a experimentar cambios en su estado anímico-mental, zambulléndose en una tristeza absoluta. Pasando después a un estado de ansiedad espeluznante. Lars Von Trier, creo que es el mejor terapeuta que te puedas cruzar y estando bajo depresión cuando escribió y filmó la película, como parece que pasó. Es muy difícil pasar por alto y obligado meter en tu cabeza, cuando Dafoe, explica los síntomas de la ansiedad. Increíble y fascinante sus imágenes y sonido.
Antichrist –
Capitulo II (Dolor). El viaje a Edén para intentar con la terapia arrancar todo dolor y, dejar atrás, esos momentos de amargura, se convierten en un frígido viaje por la mente de Gainsbourg a través del bosque. Nuevamente, la cámara lenta hace acto de presencia, paisajes idílicos, una factura fílmica impecable, su narrativa pausada es extremadamente perfecta, cautelosa y asfixiante. Una vez en Edén, comenzarán los nuevos ejercicios para intentar paliar todo el dolor que la madre está sufriendo.
Antichrist –
Capitulo III (Reina el caos). Todo está dicho, aquí es cuando realmente descubres el epicentro de la trama, cuando verdaderamente sus personajes y director, enloquecen y se pierden en una niebla de terror, gore (una escena muy curiosa), desesperación y caos total. El zorro parlanchín me dejó flipado, alucinado, lo siento, pero soy muy friki y todas estas cosas me gustan demasiado.
Antichrist –
Epílogo (Genocidio). El final y después de tanta agonía, no podía ser de otra forma que, pura expiración.
Un film de innegable visionado. Una lectura nada convencional. Una película crudísima, diferente, para nada pretenciosa y gratuita. Todo lo que se muestra está bien justificado y de necesaria visión. Hay maneras y maneras, pero una película tan extremadamente desagradable (según mucha gente), creo que no hubiera tenido otro lenguaje, que éste concretamente, o como siempre, ¿quedarnos a medias tintas?. Habrá muchos detractores por esa excesiva sexualidad llevada a límites extremos o, ese golpe de terror-gore, que derraman sadismo hasta cotas muy altas, pero el cine es cine y está para tomarlo o dejarlo pasar.
Si bajo depresión Lars consigue estos experimentos fílmicos sádicos y de brujería, agarrémonos entonces, cuando vuelva a estar cuerdo y lleve su mente al límite. Y una cosa que quiero que dejar clara, el gore, sadismo, brujería, etc… que podemos ver en esta película, nos vayáis a pensaros que es algo excesivo, es solamente, una pequeño aporte a éste género, pero que vaya manera tan sobresaliente de adentrarse en ese mundo.