Unas semanas atrás hablamos del cine español, de su estado en estos momentos. Esta semana me gustaría citaros algunos títulos relevantes que no se estrenan o si es el caso, duran bien poco en cartelera. Hablaros de esos títulos que si que llegan a la cartelera, ¿y ganan dinero?, por que me gustaría saber a mi, si de verdad, películas como
Pagafantas,
Fuga de cerebros de
Fernando Gonzalez Molina,
El asombroso mundo de Borjamari y Pocholo,
La gran aventura de Mortadelo y Filemón,
Slam etc… son tan rentables como para estrenarlas y mantenerlas en cartel. Sólo los títulos de estas películas ya causan pavor y lo único que consiguen para mi juicio y gusto, es llenar de basura la cinematografía española.
La de películas registradas que hay y que no han conseguido distribución alguna, para poder estrenarse aunque sólo haya sido una semana. Éstas, son películas invisibles y subterráneas, bien por que son cintas experimentales y coquetean con el video arte o subterráneas, por ser resucitadas, divulgadas o puestas en valor por determinados festivales, salas alternativas, etc...Véase el caso de
Mundo Fantástico de
Max Lemcke 2004 ,director y productor, que si que ha visto estrenada
Casual day. El documental
Los que quisieron matar a Franco de
Pedro Costa y
José Ramón da Cruz,
Carnaval de Sodoma, una coproducción con Mexico y dirigida por
Arturo Ripstein. Incluso, también en la animación sucede este caso, ejemplo,
Los guerreros del Apocalipsis de
Jesús M. Montané.
Por otro lado, tenemos en estos momentos directores que están consiguiendo unos resultados más que sorprendentes con sus películas, ya sea por su contenido, como por la respuesta del público y también, y muy importante, por la aportación económica de alguna que otra persona que si que cree en el buen cine. Véase el caso de
Nacho Vigalondo y su primer largometraje
Los cronocrímenes, excelente película, con un presupuesto bajísimo y una excepcional respuesta del público.
Los abandonados, primer largometraje de
Nacho cerdá.
[REC] de los directores
Jaume Balagueró y
Paco Plaza, bombazo nacional y sin precedente alguno. O la trilogía de
Jaime Rosales,
La horas del día,
La soledad y
Tiro en la cabeza. Una trilogía que dará paso a una cuarta película más contundente aún que la última, según las propias palabras del director.
Jaime Rosales es un director que se desvincula de cualquier etiqueta y se marca un camino no muy largo, pero lleno de polémica, voluntad y una capacidad de conjugar el fondo ético y sentimental de sus historias con una puesta en escena conscientemente resuelta, más allá de las fórmulas estrablecidas y dominantes, no solo en el cine español. La esperadísima cinta de
Isabel Coixet Mapa de los sonidos de Tokyo. Directora que tiene un público fiel, al que cada vez se le suman más adeptos, algunas de sus películas como
Elegy,
Mi vida sin mi, han dejado muy claro el estilo y narrativa de esta directora totalmente independiente. En definitiva, cintas que visitan por un espacio de pocos días las salas españolas.
Incluso,
Sexy Killer de
Miguel Martí, que se estrenó en Sitges el año pasado y que su llegada y permanencia en cartelera no fue la que se esperaba, bien por que no se supo promocionar, o por que la gente pasó directamente de ella. O una propuesta que fue una gran sorpresa para mi, la cinta dogma
Smoking room de
J.D. Wallovits y
Roger Gual, pagada por los propios directores y actores.
Y para añadir más leña al fuego y como ya comentaba mi colega
korvec en la primera parte de esta reseña, los dvds españoles. Títulos imposibles de conseguir y otros, con ediciones de lujo y todo, fuera de este país.